sábado, 13 de noviembre de 2010

APUNTES (VII): LE CORBUSIER

“El ángulo recto es como la integral de las fuerzas que mantienen al mundo en equilibrio. No existe más que un ángulo recto pero infinidad de otros tipos de ángulos. El ángulo recto tiene, pues, derechos sobre los otros. Es único y constante. Para trabajar el hombre necesita constantes. Sin constantes no podría ni siquiera dar un paso tras otro. El ángulo recto es la herramienta necesaria para actuar, puesto que sirve para fijar el espacio con rigor. El ángulo recto es lícito, por tanto. Forma parte de nuestro determinismo. Es obligatorio.”
“La ciudad del futuro” (1924)

LA NUEVA ARQUITECTURA

"Los postulados y las bases de la nueva arquitectura son de distinta naturaleza. Las exigencias utilitarias definen el carácter funcional del edificio. Los materiales y la estática son sus medios de fabricación. A través de la técnica de la construcción, los caracteres de distribución, los factores científicos y sociológicos ejercen una influencia considerable. Pero, sobre todo, domina la voluntad creadora del arquitecto. El define el peso específico de cada elemento y realiza, a través de su acercamiento, la unidad formal del edificio. El procedimiento por el cual la forma se realiza, determina el carácter de la nueva arquitectura. Esta no se resuelve en un decorativo externo, sino que es la expresión de la vital compenetración de todos los elementos.
El factor estético así no es denominado ya, fin en sí mismo, como la arquitectura de las fachadas, que ignora el organismo arquitectónico, sino que queda ordenado unitariamente en el conjunto, como los demás elementos y conserva, en relación con esta totalidad, su valor y su importancia. La sobrevaloración de un elemento produce siempre perturbaciones. La nueva arquitectura busca el equilibrio de todos los elementos, la armonía. Pero ésta no es una cosa exterior, esquemática, sino distinta para cada nueva obra. No comporta ningún esquema estilístico preestablecido, sino que es la expresión de la mutua compenetración de todos los elementos bajo el dominio de una voluntad realizadora. No plantea, por tanto, problemas estilísticos, sino problemas de construcción. Así se hace comprensible también la sorprendente concordancia de la apariencia formal en la nueva arquitectura internacional. No se trata de una aspiración formal a la moda, como se piensa a menudo, sino de la expresión elemental de un nuevo concepto arquitectónico. Aunque suela ser diversa, según las particularidades locales y nacionales y la personalidad de los proyectistas, sin embargo, en conjunto, es el producto de los presupuestos constantes, y de ahí la unidad de los resultados formales".
Revista Moderne Bautormen (1927). Ludwig Hilbersheimer